Así soy, la que inquieta tu alma, la que calienta tu cuerpo, la que posee tus sueños, y la que roba tu corazón.....

viernes, septiembre 14, 2012

Relatos y Fantasías - Bajo el signo de mi Señor ....Parte III


...No  podía creer haber olvidado el bolso!!!, que pensaría Fabiola cuando se entere!!, que pensaría Richard cuando le diga!! pero no tenía opción...  


- Richard, perdón... no se como decir esto... - una risa tonta invadía mi rostro, a cada palabra que pronunciaba, sentía como la butaca se transformaba en un hueco que me succionaba.  


- Temo que olvidé algo importante en el guardarropas de la fundación, no se como fué, le pido disculpas... pero voy a tener que bajarme aquí y regresar a buscarlo, yo...- no llegué a terminar esa última frase.  


- Angela, no luces como una Dama que acostumbre a disculparse tanto, seguramente algo atrajo tu mente, y alejó tu atención del bolso, suele pasar... - la sonrisa en su rostro me indicaba que lo estaba disfrutando y mucho... 









...No  había llegado a contarle que fué el bolso lo que dejé olvidado, es decir, una vez más, él iba unos pasos por delante...  



- Que la mente y la atención transiten de la mano, es algo que se puede lograr, con cierto esfuerzo y dedicación
 - agrega sin perder su sonrisa, que hacía juego con la mía, solo que en mi caso su origen era bien diferente. 

- Angela, si deseas bajar aquí, nadie te lo impedirá.... pero no veo que sea necesario - me dice en tono de ironía.  

- Pero Sr. Pascal, yo... - ingenua intento una explicación. 


- Richard, ese es el nombre recuerdas?, y por cierto, el bolso ya debe estar en "mon Residence", mi Chambellan lo envió allí, por si acaso. - me informa, esbozando otra vez esa sonrisa al final.  

- Bueno, muchas gracias... es muy importante para mi... no debió molestarse Sr. Pascal... Richard, perdón... yo... - mi asombro me impedía expresarme coherentemente.



...No podía hilvanar las palabras, increíble en mi, pero eran tantas las ideas, las imágenes, y las emociones que invadían mi mente, que sentía que iba a colapsar.... lo que comenzó como escalofríos, era ahora una sensación de acaloramiento increscendo.  



- No debes agradecer Angela, es un placer, uno vive rodeado de muchas personas, pero son pocas las que motivan esa sensación, "plaisir", y hablando de ello, tienes algún compromiso pautado? sería un gran placer invitarte a mon Residence, a recibir el amanecer, disfrutando un armónico desayuno, desde el jardin d'hiver, si'l vous plaît...  - sorprendía otra vez.


...Me  dejaba sin palabras, otra muy poco frecuente situación conmigo, no era una amplia dominadora del francés, pero lo era suficiente como para entender la propuesta, y así le respondería....   


...Pero  también recordaba nuestras breves partidas con mi primo Jorge, eximio jugador de ajedrez, nunca voy a olvidar la alegría que me producía al comienzo, el doblegar 3 o 4 de sus piezas, seguida de la inmediata decepción al oir su "jaque mate", denotando que sólo había sido víctima de su hábil estrategia...

como ahora con Richard...?  


- Oui Monsieur...C'est un plaisir - contesto rápido, los interrogantes inmovilizan a la mayoría de las personas, pero a mi.... me motivan como pocas cosas en la vida!!! empiezo a creer que se refleja en mis ojos, y siempre aparece quien los sabe descifrar...  


...Le  respondo sin pensarlo demasiado... me quedo mirándolo, mis latidos parecen más intensos, se que debo lucir como regalito con cinta y todo... pero no puedo apartar mi vista de sus ojos azules... 


- Karl, a la izquierda, por la costa, vamos a "La Residence", avisame cuando lleguemos a la marina de San Fernando - Richard le indica las nuevas ódenes al chauffeur, quien asiente con un movimiento de cabeza, y una breve mirada por el espejo, perdiéndose su silueta, a medida que el cristal esfumado va cerrando el habitáculo posterior...  


...Si  al principio del viaje, los fotogramas eran de una película casi documental, ahora se asemejaban a los de una escena de suspenso, trataba de no pensar, solo percibir, ingoraba que iba a suceder, pero lo esperaba ansiosamente, cada segundo que pasaba, me sentía más vulnerable, sin defensas ante lo que pudiera acontecer.  


...Las  primeras luces de la mañana destellaban en el cielo, la costa se veía calma, sus ojos se reflejaban en la ventana, al costado de los míos, sentía su presencia, mas cercana...  


- Richard, yo... - sale de mi boca, casi incontenible.  


- No es el ser hermosa lo que hace destacar a una dama - interrumpe Richard mi ya cortada frase, mirando por la ventana como meditando en voz alta.  


- Es el mensaje que trasmite su mirada, lo que despierta esa sensación profunda e incontenible, la conexión con la escencia mas íntima, lo que hace especial a una dama... - agrega el Conde, esta vez clavando sus ojos en mi.  






- Alguna vez alguien le puso nombre a esa sensación incomparable, que solo es capaz de despertar una mujer especial, sabes cual es Angela? - pregunta el Conde, sin esperar mi respuesta...  



- Deseo!!! - es la forma en que Richard lo dice, la expresión en su rostro, que transforma esa respuesta, en su mismísimo significado...  





...Y  creo que lo dije todo con mis ojos, con mi mensaje... sus manos esta vez no son las del artesano, son las del escultor, que modela mi cuerpo, imponiendo su impronta a lo hecho en mi por la naturaleza, sus labios bosquejan los míos a su gusto, una... y otra vez, insesantes, inquietos, intensos...   


- Fue mi placer que hoy te trajo aquí, bella Angela, pero es mi deseo el que ahora se apodera de vos, dama especial que trasmites tu presencia, sólo pido a tu voz, que rechace mi fuego y me diga que no - Richard suelta sus palabras como dagas.  


- O que conceda mi anhelo, que selle tu entrega para ser tu Señor, que desde ahora sea tu escencia, la que siga a mi voz, y me otorgues la gracia de moldear tu pasión. - su voz sonaba firme, potente, intoxicante, seductora.  


- Si Richard... - no tuve que esforzarme para decirlo, creo que estoy fuera de cualquier autocontrol posible, si desde hace un buen rato me estaba sintiendo en su poder , ahora ya no hay parte de mi que no desee ser suya.  


...Sus  hábiles manos recorren mi cuello, y bajan despacio, constantes, recorriendo a su paso, desarman mi escote con la sutileza de un mago, mi vestido borravino ya casi no cubre mi piel erizada, mi sentir vulnerable alimenta mi fuego, ya soy suya, no hay más remedio....  


- Monsieur Pascal!!! - golpeando suavemente el crystal, Karl cumplía el mandato del Señor.   


- Arribamos a Marina Nueva - informa el corpulento alemán.  


...Y  Richard me observa, sonrie y me acomoda el cabello sobre el rostro, abre el cofre de nacar sobre el lateral del habitáculo, y saca un bolso del interior.... de terciopelo colorado.... con un simbolo azul en la esquina...  


- Tómalos Angela, es mi deseo que los uses para mi, hoy quiero que seas mi más bella inspiración... - me dice el Conde entre susurros.  


- Hoy serás todas en una: mi dama, mi esclava, mi amante y mi diosa...- mientras me acariciaba las manos, me besaba en los labios, recorría mi pecho, y mis medias de encaje.  


- Bienvenue a mon "Residence" - dice Richard, me besa una vez mas... y luego desciende del auto. 






continuará.......................



Carla Santisse.



 


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